Archivo mensual: marzo 2010

Última actualización

A partir de hoy, el dominio http://www.ladoblehelice.com acoge la transformación de este blog en otra cosa. Esta herramienta que durante casi dos años y medio ha estado al servicio de un proyecto, la investigación y escritura de un libro, Justicia poética, deja por tanto de actualizarse.

Pero no se vayan, porque todo seguirá donde estaba: www.ladoblehelice.com

Justicia poética en Letras Libres

Letras Libres publica en el número de marzo la entrevista que me hizo Toño Angulo Daneri. Aquí pueden leerla en pdf.

Me gustaría precisar, aún con todo, un detalle que creo queda algo confuso en la entradilla. No se trata sólo de que

Pruebas de adn y otras demostraron que, en efecto, García Carbonell era, junto con un pariente nunca identificado, uno de los criminales de la segunda oleada [de violaciones de 1995] y, por tanto, seguramente también de la primera [de 1991].

Es que una prueba de ADN también demostró que García Carbonell era el violador en uno de los casos de 1991, y así  lo reconoció seis años después el Tribunal Supremo, que declaró inocentes a Tommouhi y Mounib de esa violación de Olesa.

El problema es que hay otras condenas que siguen vigentes. En una de ellas, el caso de Cornellà,  las pruebas científicas también exculparon a Tommouhi, el único condenado en dicha causa, pero el tribunal, presidido por Margarita Robles Fernández, no entendió que los análisis además de sangre, se referían también al semen del violador, como explican los capítulos 23, 24 y 25 del libro. Tommouhi fue condenado a 24 años y dos días de cárcel. El violador y su cómplice, siguen impunes.

De la distancia

Leyendo un artículo en The Believer, poco después de haber releído algunos capítulos del libro –los estoy preparando para distribuirlos–, estas dos frases resumen la sensación que me produce ahora la relectura de ciertos tramos de esos capítulos (Cornellà y Tarragona, sobre todo):

En «Del rigor en la ciencia» Borges es todavía más radical: trata de «un mapa del Imperio que tenía el tamaño del Imperio». Este mapa «perfecto» coincide punto por punto con los lugares para los que está pensado servir de guía –y se convirte, por tanto, en inservible. (The Believer, p. 38)

Pues eso.

Pueden escucharlo entero, de la voz del propio Borges.